Una camioneta de valores de la empresa SEPSA, que viajaba de Querétaro a Celaya, Guanajuato, fue interceptada y robada durante su recorrido; en ella se transportaban 118 mdp.
Aunque de inmediato se implementó un fuerte operativo para su búsqueda, la unidad fue encontrada varias horas después en una zona rural, enterrado y sin el botín.
El reporte policíaco arrojó que, posiblemente, los delincuentes contaban con la información acerca de la ruta y el recorrido que haría el vehículo, por lo que ya se incluyó como línea de investigación.
El móvil había salido esta mañana de la colonia Felpe Carrillo, de Querétaro, y aunque iba escoltado por dos camionetas y tres elementos de seguridad privada como acompañantes e iban dos dentro del camión.
El convoy habría sido interceptado en la carretera, a la altura de Apaseo el Grande, cerca de la comunidad La Palma, por hombres que en varios vehículos bloquearon el paso y despojaron a los guardias de cuatro armas que portaban, bajaron a los dos elementos de seguridad que viajaban en el camión blindado con el dinero y se lo llevaron.
Los guardias fueron encontrados con varios golpes.
Una vez que se dio aviso a las autoridades, a través de la central operativa de la empresa de seguridad se rastreó el camión a través del GPS y fue ubicado en una colonia de Apaseo el Grande.
Posteriormente, la unidad fue movida a la comunidad Rincón de Centeno en Juventino Rosas.
Se implementó un operativo carretero con la participación de varias corporaciones en el que se instalaron filtros en varias carreteras.
Finalmente, la unidad fue encontrada enterrada en la comunidad Rincón de Centeno, en una barranca entre dos cerros.
El dinero ya no estaba en el vehículo.