Alrededor de 20 niños resultaron heridos, tres de ellos de gravedad, luego de que una persona que trabajaba en el área de mantenimiento de una escuela primaria, los atacara con un martillo, según se informó.
Se dijo que la reacción del atacante se debió a que la dirección del plantel decidió no renovarle contrato al inicio del año, por lo que en venganza tomó un martillo de su herramienta y agredió a los pequeños.
El colegio en mención está situad en el distrito de Xicheng, Pekín, en donde decenas de padres de familia hicieron protesta en las afueras para exigir una explicación de lo ocurrido.
Mientras, los menores fueron trasladados a hospitales, y aunque sus vida no corren peligro, tres de ellos están en una situación critica de salud.
Este hecho se suma al reciente ocurrido a finales de octubre, en donde una mujer hirió a 14 niños de una guardería con un cuchillo de cocina, en el centro de China.
Estas escenas hacen ver a China como un país inseguro y con problemas sociales que recaen en violencia al interior de los centros escolares.