Esta tarde, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dio a conocer que cinco trabajadores y trabajadoras fueron dadas de baja de la institución, luego de que fueron responsables de que el cuerpo de una bebé recién nacida fuera levada a la fosa común y no ser entregada a su padres en la clinica número 1, de la avenida Nicolás Zapata en la capital potosina. Este caso, fue denunciado por los propios padres hace algunos días.
El IMSS señaló «al llevar a cabo las diligencias correspondientes, determinó la rescisión laboral de cinco trabajadoras y trabajadores; asimismo, procedieron dos sanciones administrativas».
Así mismo, externó un sentido pésame a los padres afectados al no tener a su bebé en el tiempo correspondiente, y por lo cual no hicieron la velación ni la santa sepultura como debía hacerse.
Añadió que se realizará un proceso de mejora para la correcta ejecución de sus protocolos de atención médica en beneficio de la población derechohabiente.