La perforación constante agrava la crisis hídrica en lugar de solucionarla, advierte el Consejo Hídrico Estatal.
La actual crisis hídrica que enfrenta San Luis Potosí no afecta a todos por igual. Así lo señaló Jonathan Quintero García, presidente del Consejo Hídrico Estatal (CHE), al subrayar que el problema va más allá de la escasez: se trata de una profunda desigualdad en el acceso al recurso.
“Mientras ciertos sectores con capacidad de acaparamiento seguían extrayendo agua como si nada ocurriera, gran parte de la ciudadanía tuvo que enfrentarse a cortes prolongados o a esquemas de tandeo”, explicó el también investigador, quien sostiene que la crisis revela una brecha social más que un simple desabasto.
En este contexto, Quintero García criticó la estrategia anunciada por el presidente municipal Enrique Galindo Ceballos, quien propuso perforar 12 nuevos pozos en zonas urbanas y rurales como medida para paliar la situación. Según el titular del CHE, esta solución no solo es insuficiente, sino contraproducente: “La perforación constante es una de las principales causas del abatimiento de los acuíferos, ya que fomenta su sobreexplotación y compromete su capacidad de recuperación”.
Además, advirtió que esta práctica impide la recarga natural del manto freático, al impermeabilizar áreas clave para la infiltración del agua de lluvia, lo que también agrava el riesgo de inundaciones.