En la madrugada de este miércoles, se alertó sobre al presencia de un cadáver en el interior de una vivienda de la colonia Julián Carrillo, metros adelante de donde se localizó un cuerpo decapitado.
Testigos dieron aviso al sistema de emergencias 911, para informar sobre la presencia de un sujeto sin vida, el cual estaba amarrado de pies y manos, y presentaba señales de haber sufrido tortura.
Agentes estatales acudieron al llamado, percatándose del macabro hallazgo. El occiso había sido asesinado con golpes en la cabeza y después fue colgado con un cable de luces led.
Agentes de investigación reportaron que el cuerpo tenía varios días de haber sido asesinado, por lo que tenia un avanzado estado de descomposición.
Lo curioso, además de comprobar que la violencia y los homicidios dolosos siguen imparables en la capital potosina, es que ocurrió a unos metros de donde, ayer, fue encontrado otro hombre sin vida y con la cabeza entre sus piernas.
La ciudadanía teme que se normalicen este tipo de noticias, provocándole que las autoridades se desinteresen cada vez más en recuperar la tranquilidad.
