Una bomba distribuidora de gasolina, en una gasolinera ubicada en la avenida Damián Carmona, fue clausurada por la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), luego de realizarse un operativo de inspección en distintos establecimientos de la ciudad de San Luis Potosí.
Dichas inspecciones se realizaron de manera aleatoria, con el fin de verificar que las bombas expendedoras de combustible no incurran en anomalías y cumplan con la normativa, para que despachen y vendan litros de a litro.
Así lo informó la propia dependencia federal, confirmando la inmovilización de una de las bombas ubicada en la avenida Damián Carmona, a unos metros de Av. Ferrocarril.
En la gasolinera donde se inmovilizó la bomba, se colocaron los sellos de clausura, para evitar siga despachando en tanto no corrijan las observaciones señaladas y se garantice que los clientes reciban la cantidad de combustible por la que están pagando.
La estación mencionada cuenta con seis bombas despachadoras, sin embargo, solo una fue clausurada, por lo que el resto sigue operando de forma regular.
Cabe señalar que hace unos días la Profeco dio a conocer que las gasolineras Shell son las que venden más caro el combustible.
