No sólo radioescuchas de Radio Universidad, perteneciente a la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), han mostrado su inconformidad por la gestión dado a este proyecto cultural de San Luis Potosí, cuando Ana Isabel Méndez Ortíz ocupo la dirección, al salir de la dirección de la Facultad de Ciencias de la Comunicación; también lo han hecho comunicólogos, que son trabajadores y egresados de la misma Universidad y quienes han aguantado malos tratos y cambios administrativos, afectado el contenido de la Radio.
A través de El Radar MX, envían una carta abierta al recién elegido rector de la UASLP, Dr. Alejandro Zermeño Guerra, para que se sensibilice ante los desacuerdos y angustia que padecen empleados al interior de Radio Universidad, así como los potosinos que han seguido, durante años, el contenido de esta estación.
A continuación, los documentos enviados íntegramente:
Carta Abierta al Rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí
Dr. Alejandro Zermeño Guerra
Estimado Rector:
Nos dirigimos a usted enviándole un cordial saludo y felicitándolo por su nuevo cargo al frente de la máxima casa de estudios.
En relación a este año 2020, sabemos que es muy complicado en todos los sentidos, debido a la contingencia sanitaria de COVID-19 que aún enfrentamos; sin embargo, la Universidad Autónoma de San Luis Potosí afronta nuevos retos y desde su llegada el pasado 30 abril se respiran cambios favorables para la comunidad universitaria.
Haciendo referencia y remembranza en el ámbito cultural; en este presente año no olvidemos que Radio Universidad XEXQ-AM “Por la cultura y por el arte”, cumple 82 años de su existencia; lamentablemente como radioescuchas nos damos cuenta que la estación sigue en el olvido, ya que desde hace tres años ha bajado de calidad y se ha perdido el interés por escucharla. Nosotros seguíamos día a día las transmisiones y nos mantuvimos al tanto de lo que pasaba en el quehacer cultural de nuestra entidad, así como en la propia universidad, es lamentable que la segunda estación cultural a nivel nacional sea olvidada y nada reconocida.
En la actualidad existen programas que por su contenido o música muy comercial, dejan mucho que desear de lo que estábamos acostumbrados a escuchar.
Consideramos, deberían de tener como en antaño locutores que nos hacían los momentos más amenos, nos decían cosas para reflexionar y sus comentarios nos dejaban enseñanzas además de la buena música que nos ofrecía la estación, y de la música culta que caracterizaba a XEXQ. Actualmente nos damos cuenta de que se han mutilado las grandes obras de la música clásica y se ha convertido en una estación sin sentido.
Nos hemos manifestado por medio de llamadas telefónicas, hemos acudido a las instalaciones, publicado en redes sociales para mostrar esta inconformidad y evaden nuestra petición de que vuelva a ser la estación cultural por antonomasia que era.
En estos casi cuatro años de la llamada “Nueva Era de Radio Universidad”, se ha olvidado lo principal, sus raíces y esencia de la misma, convirtiéndose en otra estación comercial sin nada que aportar a la cultura potosina.
Sr. Rector urge rescatar a Radio Universidad del hoyo en que la han tenido estos años, bajo una dirección soberbia, sin sentido humano y sin conocimientos de radio, ni de la historia y todo lo que hay detrás de ella; anhelamos que sea nuevamente por siempre la estación cultural universitaria.
De antemano agradecemos su comprensión y sus finas atenciones para esta petición.
A LA OPINIÓN PÚBLICA:
En el marco de los 82 años de Radio Universidad de San Luis Potosí, no hay nada que festejar, pero mucho que lamentar, iniciaremos con la pérdida de radioescuchas y a quienes se le negó de manera contundente, su derecho de audiencia al no tomar en cuenta su opinión y enojo a la mal llamada “nueva era de Radio Universidad”.
Los cambios siempre son importantes, pero en este caso, nunca funcionó el cambio tan drástico y mal planeado por parte de quienes dirigen la estación.
Radio Universidad FM, el famoso 88.5 tenía un lugar muy importante y estaba en el gusto de gran parte de la sociedad, gracias a los programas musicales, de contenido y de cultura, con los que contaba en su barra de programación, la actual deja mucho que desear.
Y prácticamente en el olvido, el 1190, la frecuencia octogenaria en amplitud modulada, desaprovechada por el desconocimiento de su trascendencia histórica, aunque conserva su esencia clásica ya no se escuchan obras completas, ¡que lastima 82 años a la basura!
La frecuencia universitaria en el municipio de Matehuala, con un año de estar en el cuadrante y que le han llamado “Universidad Estéreo”, nos hace recordar a “Universal Estéreo” con la diferencia de que esta última tiene buen gusto por la música que programan, mientras que en “Universidad Estéreo” replican la programación del 88.5 y se puede comprobar al escuchar ambas emisoras y hacer la comparación.
La llamada “nueva era”, quizá se refería a exterminar con golpe bajo y de manera contundente el trabajo de anteriores directores, que con conocimiento y pasión posicionaron a la estación universitaria.
No queda nada del “otro perfil de la radio” y absolutamente nada de “por la cultura y por el arte”, porque la actual directora y sus muy allegados colaboradores, no tienen el perfil y notablemente no saben que es arte, ni conocimiento mínimo de lo que es cultura, pero si una gran capacidad, para simular que se trabaja, un cínico descaro de decir que todo está bien, la prepotencia y soberbia con la que se conducen es bien conocida.
Ana Isabel Méndez Ortiz, pasará a la historia por haber destruido el esfuerzo y trabajo de sus antecesores, la peor administración en la historia de Radio Universidad. Lo más lamentable es la pérdida del valioso tesoro de los acetatos, cintas y demás material histórico que poseía la estación universitaria y que puso en manos de personas sin ética profesional ni conocimiento.
En pláticas con el personal, se percibe la molestia por la actual situación, pues manifiestan que se vive un negativo ambiente laboral y gran divisionismo que entorpece el trabajo en equipo, lamentan el gran error de la llamada “NUEVA ERA DE RADIO UNIVERSIDAD”, error que se puede corregir.
Atentamente,
Fieles Radioescuchas de Radio Universidad
